Desde que todo este pinche jueguito comenzó, siempre he pensado que mi trabajo es como un matrimonio. Bueno, hasta tuve que dejar mi casa para estar en él. Quiero suponer que todo esto es más bien, la primera pelea fuerte, parece ser que si, me voy a quedar en la oficina, siempre y cuando se arreglen ciertas condiciones. Sigo extrañando bien cabrón a la abuela, y a mi gorda y peluda gata, pero ahora que me acuerdo ¿No pasé putos ocho años persiguiendo lo que quería? Si, si lo hice.
He descubierto algo… ¡Odio crecer! Bueno, en realidad no odio eso, lo que me zurra es que no se puede tener todo al mismo tiempo en esta, cochina vida mortal.
¿Qué sigue?, buena pregunta. En este momento todo es una gran interrogante. Primero que nada quienes estan a prueba son mesmamente mis patrones, he dicho. Vamos a ver si sus ofertas son serias, o todo lo que dijeron es otra de esas estrategias corporativas, para, no sé para qué.
Veamos, que pasa. Por ahora estoy tranquila, solamente eso. Veamos en que acaba esta pinche historia de la vida rial.